Buenas noches, participantes de la asignatura CASTELLANO Y LITERATURA II. A continuación se les indica la actividad que realizarán hasta el 10-05-2010.
1.-Luego de estudiar el verbo en toda su extensión. Comentar en el blog la importancia de éste para la construcción coherente de un texto.
2.-Llevar ala aula una lista de verbos regulares e irregulares. Además de lo indicado en el aula, la clase pasada.
domingo, 2 de mayo de 2010
domingo, 28 de marzo de 2010
Sintagmas
PARA ESTUDIANTES DE CASTELLANO Y LITERATURA III, 5to SEMESTRE 2010
Buenas noches, ante todo me disculpo por no colocar la actividad en la fecha acordada; tuve un problema con el computador.
A continuación se le presenta un párrafo:
1.- Imprímalo
2.- Realice las actividades que se indican.
3.- Llévelo a clase.
“Frente al enunciado y la oración, el sintagma se define por las siguientes características: a) Palabra o grupo de palabras que, dentro de un enunciado, posee un sentido unitario aunque incompleto. b) Desempeña una única función sintáctica. c) Su estructura está formada por un núcleo, que es de obligatoria aparición, y por unos modificadores que pueden aparecer o no.
Podemos encontrar cinco (en realidad son solo cuatro) tipos diferentes de sintagmas dependiendo de cuál sea su núcleo:
Sintagma Nominal (SN).- La casa rosada es mía.
Sintagma Verbal (SV).- Pepe come pan con manteca.
La oración gramatical básica se construye por dos sintagmas primordiales o constituyentes inmediatos de la oración, ya que son el resultado de un primer corte o segmentación: O = SN + SV. El SN que es constituyente inmediato de la oración realiza siempre la función de sujeto, función que podemos definir como la persona, animal o cosa que realiza, experimenta o padece el proceso expresado por el verbo. El SV realizará la función de predicado, al que definimos como el proceso que ejecuta, experimenta o padece el sujeto.
Los núcleos del sujeto y del predicado tendrán que mantener concordancia en persona y número para asegurar así la cohesión entre ambos sintagmas.
Aquellas que se construyen con verbos que significan fenómenos de la naturaleza y en las cuales la realización de la acción verbal no puede atribuirse a ningún sujeto: Ayer granizó.
En muchos casos, los verbos SER, ESTAR, HABER, HACER, y algunos más pueden comportarse como unipersonales: Es tarde / Hubo corrida de toros / Hace calor... El sintagma nominal consta necesariamente de un núcleo que ha de ser un sustantivo y el verbal tendrá como núcleo un verbo…”
Actividades:
a)Delimite las oraciones utilizando [ ]
b)Extraiga 2 oraciones y analícelas gramaticalmente.
c)Revise el concepto de Gramática Castellana y comente en el blog: ¿Cuál es la importancia del estudio de ésta para las personas en general y en especial para usted? ¿Qué entiende por sintagmas y cuál es su utilidad?
Buenas noches, ante todo me disculpo por no colocar la actividad en la fecha acordada; tuve un problema con el computador.
A continuación se le presenta un párrafo:
1.- Imprímalo
2.- Realice las actividades que se indican.
3.- Llévelo a clase.
“Frente al enunciado y la oración, el sintagma se define por las siguientes características: a) Palabra o grupo de palabras que, dentro de un enunciado, posee un sentido unitario aunque incompleto. b) Desempeña una única función sintáctica. c) Su estructura está formada por un núcleo, que es de obligatoria aparición, y por unos modificadores que pueden aparecer o no.
Podemos encontrar cinco (en realidad son solo cuatro) tipos diferentes de sintagmas dependiendo de cuál sea su núcleo:
Sintagma Nominal (SN).- La casa rosada es mía.
Sintagma Verbal (SV).- Pepe come pan con manteca.
La oración gramatical básica se construye por dos sintagmas primordiales o constituyentes inmediatos de la oración, ya que son el resultado de un primer corte o segmentación: O = SN + SV. El SN que es constituyente inmediato de la oración realiza siempre la función de sujeto, función que podemos definir como la persona, animal o cosa que realiza, experimenta o padece el proceso expresado por el verbo. El SV realizará la función de predicado, al que definimos como el proceso que ejecuta, experimenta o padece el sujeto.
Los núcleos del sujeto y del predicado tendrán que mantener concordancia en persona y número para asegurar así la cohesión entre ambos sintagmas.
Aquellas que se construyen con verbos que significan fenómenos de la naturaleza y en las cuales la realización de la acción verbal no puede atribuirse a ningún sujeto: Ayer granizó.
En muchos casos, los verbos SER, ESTAR, HABER, HACER, y algunos más pueden comportarse como unipersonales: Es tarde / Hubo corrida de toros / Hace calor... El sintagma nominal consta necesariamente de un núcleo que ha de ser un sustantivo y el verbal tendrá como núcleo un verbo…”
Actividades:
a)Delimite las oraciones utilizando [ ]
b)Extraiga 2 oraciones y analícelas gramaticalmente.
c)Revise el concepto de Gramática Castellana y comente en el blog: ¿Cuál es la importancia del estudio de ésta para las personas en general y en especial para usted? ¿Qué entiende por sintagmas y cuál es su utilidad?
Clasificación de las palabras
PARA ESTUDIANTES DE CASTELLANO Y LITERATURA II, 3ER SEMESTRE 2010
Buenas noches, ante todo me disculpo por no colocar la actividad en la fecha acordada; tuve un problema con el computador.
A continuación se le presenta un párrafo:
1.- Imprímalo
2.- Realice las actividades que se indican.
3.- Llévelo a clase.
“La función sintáctica propia del sustantivo es la de núcleo del sintagma nominal. Semánticamente se clasifican atendiendo a distintos criterios significativos y no formales. Así, en oposición significativa tenemos los siguientes tipos: COMUNES: clasifican los objetos de la realidad física o mental como pertenecientes a una clase. Así, a un sustantivo común se le asignan normalmente una serie de rasgos significativos, recogidos en el diccionario: perro, bondad, estudio, mesa, padre, mujer; PROPIOS : identifican con su etiqueta a un objeto dado, que resulta inconfundible para los interlocutores. De esta manera, individualizan, pero no aportan significación. Se dividen en: 1) topónimos (Guadalquivir, Mediterráneo, Escorial); 2) antropónimos (Juan, Adela) con una variante los nombres hipocorísticos: Lola, Paco, Pepe... “
“El sustantivo consta de un lexema y de unos morfemas, que pueden ser constitutivos y facultativos. Los facultativos o derivativos pueden ser prefijos o sufijos, de muy diversa índole. Hay que mencionar como propios del sustantivo los sufijos derivativos aumentativos, diminutivos y despectivos. En cuanto a los constitutivos, el sustantivo tiene como propios solamente dos: el género y el número. En este sentido, a veces no puede flexionarlos. Efectivamente, el sustantivo sólo admite la flexión de género cuando éste viene determinado por el sexo: perro / perra, gato / gata, niño / niña. Por contra, no podemos buscar el equivalente femenino o masculino de libro, tranvía, mesa, partitura, etc. Diremos en estos casos que el sustantivo, aun teniendo morfema de género, carece de morfo (materialización de ese morfema), puesto que no puede flexionarse. En sentido análogo, aunque motivado por razones distintas, nos encontramos con sustantivos que no pueden flexionarse en plural: salud, sed, hambre, caos... “
Actividades:
a) Identifique los sustantivos subrayándolos con 1 línea, los adjetivos con 2, los verbos con 3, los adverbios con 4, los determinantes enciérrelos en un círculo.
b) Revise el concepto de Gramática Castellana y comente en el blog: ¿Cuál es la importancia del estudio de ésta para las personas en general y en especial para usted?
Buenas noches, ante todo me disculpo por no colocar la actividad en la fecha acordada; tuve un problema con el computador.
A continuación se le presenta un párrafo:
1.- Imprímalo
2.- Realice las actividades que se indican.
3.- Llévelo a clase.
“La función sintáctica propia del sustantivo es la de núcleo del sintagma nominal. Semánticamente se clasifican atendiendo a distintos criterios significativos y no formales. Así, en oposición significativa tenemos los siguientes tipos: COMUNES: clasifican los objetos de la realidad física o mental como pertenecientes a una clase. Así, a un sustantivo común se le asignan normalmente una serie de rasgos significativos, recogidos en el diccionario: perro, bondad, estudio, mesa, padre, mujer; PROPIOS : identifican con su etiqueta a un objeto dado, que resulta inconfundible para los interlocutores. De esta manera, individualizan, pero no aportan significación. Se dividen en: 1) topónimos (Guadalquivir, Mediterráneo, Escorial); 2) antropónimos (Juan, Adela) con una variante los nombres hipocorísticos: Lola, Paco, Pepe... “
“El sustantivo consta de un lexema y de unos morfemas, que pueden ser constitutivos y facultativos. Los facultativos o derivativos pueden ser prefijos o sufijos, de muy diversa índole. Hay que mencionar como propios del sustantivo los sufijos derivativos aumentativos, diminutivos y despectivos. En cuanto a los constitutivos, el sustantivo tiene como propios solamente dos: el género y el número. En este sentido, a veces no puede flexionarlos. Efectivamente, el sustantivo sólo admite la flexión de género cuando éste viene determinado por el sexo: perro / perra, gato / gata, niño / niña. Por contra, no podemos buscar el equivalente femenino o masculino de libro, tranvía, mesa, partitura, etc. Diremos en estos casos que el sustantivo, aun teniendo morfema de género, carece de morfo (materialización de ese morfema), puesto que no puede flexionarse. En sentido análogo, aunque motivado por razones distintas, nos encontramos con sustantivos que no pueden flexionarse en plural: salud, sed, hambre, caos... “
Actividades:
a) Identifique los sustantivos subrayándolos con 1 línea, los adjetivos con 2, los verbos con 3, los adverbios con 4, los determinantes enciérrelos en un círculo.
b) Revise el concepto de Gramática Castellana y comente en el blog: ¿Cuál es la importancia del estudio de ésta para las personas en general y en especial para usted?
jueves, 14 de enero de 2010
Buenas noches participantes de CASTELLANO Y LITERATURA III, a continuación les explico la actividad que deben llevar el lunes 18-01-2010
1. Imprima el cuento que se le presenta
2. Explique como se refleja en éste el dialogismo, la polifonía, la alteridad y la subjetividad
3. Realice el análisis semántico del discurso
1. Imprima el cuento que se le presenta
2. Explique como se refleja en éste el dialogismo, la polifonía, la alteridad y la subjetividad
3. Realice el análisis semántico del discurso
A LA DERIVA
Horacio Quiroga (autor)
El hombre pisó algo blancuzco, y en seguida sintió la mordedura en el pie. Saltó adelante, y al volverse con un juramento vio una yaracacusú que, arrollada sobre sí misma, esperaba otro ataque.
El hombre echó una veloz ojeada a su pie, donde dos gotitas de sangre engrosaban dificultosamente, y sacó el machete de la cintura. La víbora vio la amenaza, y hundió más la cabeza en el centro mismo de su espiral; pero el machete cayó de lomo, dislocándole las vértebras.
El hombre se bajó hasta la mordedura, quitó las gotitas de sangre, y durante un instante contempló. Un dolor agudo nacía de los dos puntitos violetas, y comenzaba a invadir todo el pie. Apresuradamente se ligó el tobillo con su pañuelo y siguió por la picada hacia su rancho.
El dolor en el pie aumentaba, con sensación de tirante abultamiento, y de pronto el hombre sintió dos o tres fulgurantes puntadas que, como relámpagos, habían irradiado desde la herida hasta la mitad de la pantorrilla. Movía la pierna con dificultad; una metálica sequedad de garganta, seguida de sed quemante, le arrancó un nuevo juramento.
Llegó por fin al rancho y se echó de brazos sobre la rueda de un trapiche. Los dos puntitos violeta desaparecían ahora en la monstruosa hinchazón del pie entero. La piel parecía adelgazada y a punto de ceder, de tensa. Quiso llamar a su mujer, y la voz se quebró en un ronco arrastre de garganta reseca. La sed lo devoraba.
-¡Dorotea! -alcanzó a lanzar en un estertor-. ¡Dame caña1!
Su mujer corrió con un vaso lleno, que el hombre sorbió en tres tragos. Pero no había sentido gusto alguno.
-¡Te pedí caña, no agua! -rugió de nuevo-. ¡Dame caña!
-¡Pero es caña, Paulino! -protestó la mujer, espantada.
-¡No, me diste agua! ¡Quiero caña, te digo!
La mujer corrió otra vez, volviendo con la damajuana. El hombre tragó uno tras otro dos vasos, pero no sintió nada en la garganta.
-Bueno; esto se pone feo -murmuró entonces, mirando su pie lívido y ya con lustre gangrenoso. Sobre la honda ligadura del pañuelo, la carne desbordaba como una monstruosa morcilla.
Los dolores fulgurantes se sucedían en continuos relampagueos y llegaban ahora a la ingle. La atroz sequedad de garganta que el aliento parecía caldear más, aumentaba a la par. Cuando pretendió incorporarse, un fulminante vómito lo mantuvo medio minuto con la frente apoyada en la rueda de palo.
Pero el hombre no quería morir, y descendiendo hasta la costa subió a su canoa. Sentose en la popa y comenzó a palear hasta el centro del Paraná. Allí la corriente del río, que en las inmediaciones del Iguazú corre seis millas, lo llevaría antes de cinco horas a Tacurú-Pucú.
El hombre, con sombría energía, pudo efectivamente llegar hasta el medio del río; pero allí sus manos dormidas dejaron caer la pala en la canoa, y tras un nuevo vómito -de sangre esta vez- dirigió una mirada al sol que ya trasponía el monte.
La pierna entera, hasta medio muslo, era ya un bloque deforme y durísimo que reventaba la ropa. El hombre cortó la ligadura y abrió el pantalón con su cuchillo: el bajo vientre desbordó hinchado, con grandes manchas lívidas y terriblemente dolorosas. El hombre pensó que no podría jamás llegar él solo a Tacurú-Pucú, y se decidió a pedir ayuda a su compadre Alves, aunque hacía mucho tiempo que estaban disgustados.
La corriente del río se precipitaba ahora hacia la costa brasileña, y el hombre pudo fácilmente atracar. Se arrastró por la picada en cuesta arriba, pero a los veinte metros, exhausto, quedó tendido de pecho.
-¡Alves! -gritó con cuanta fuerza pudo; y prestó oído en vano.
-¡Compadre Alves! ¡No me niegue este favor! -clamó de nuevo, alzando la cabeza del suelo. En el silencio de la selva no se oyó un solo rumor. El hombre tuvo aún valor para llegar hasta su canoa, y la corriente, cogiéndola de nuevo, la llevó velozmente a la deriva.
El Paraná corre allí en el fondo de una inmensa hoya, cuyas paredes, altas de cien metros, encajonan fúnebremente el río. Desde las orillas bordeadas de negros bloques de basalto, asciende el bosque, negro también. Adelante, a los costados, detrás, la eterna muralla lúgubre, en cuyo fondo el río arremolinado se precipita en incesantes borbollones de agua fangosa. El paisaje es agresivo, y reina en él un silencio de muerte. Al atardecer, sin embargo, su belleza sombría y calma cobra una majestad única.
El sol había caído ya cuando el hombre, semitendido en el fondo de la canoa, tuvo un violento escalofrío. Y de pronto, con asombro, enderezó pesadamente la cabeza: se sentía mejor. La pierna le dolía apenas, la sed disminuía, y su pecho, libre ya, se abría en lenta inspiración.
El veneno comenzaba a irse, no había duda. Se hallaba casi bien, y aunque no tenía fuerzas para mover la mano, contaba con la caída del rocío para reponerse del todo. Calculó que antes de tres horas estaría en Tacurú-Pucú.
El bienestar avanzaba, y con él una somnolencia llena de recuerdos. No sentía ya nada ni en la pierna ni en el vientre. ¿Viviría aún su compadre Gaona en Tacurú-Pucú? Acaso viera también a su ex patrón mister Dougald, y al recibidor del obraje.
¿Llegaría pronto? El cielo, al poniente, se abría ahora en pantalla de oro, y el río se había coloreado también. Desde la costa paraguaya, ya entenebrecida, el monte dejaba caer sobre el río su frescura crepuscular, en penetrantes efluvios de azahar y miel silvestre. Una pareja de guacamayos cruzó muy alto y en silencio hacia el Paraguay.
Allá abajo, sobre el río de oro, la canoa derivaba velozmente, girando a ratos sobre sí misma ante el borbollón de un remolino. El hombre que iba en ella se sentía cada vez mejor, y pensaba entretanto en el tiempo justo que había pasado sin ver a su ex patrón Dougald. ¿Tres años? Tal vez no, no tanto. ¿Dos años y nueve meses? Acaso. ¿Ocho meses y medio? Eso sí, seguramente.
De pronto sintió que estaba helado hasta el pecho.
¿Qué sería? Y la respiración...
Al recibidor de maderas de mister Dougald, Lorenzo Cubilla, lo había conocido en Puerto Esperanza un viernes santo... ¿Viernes? Sí, o jueves...
El hombre estiró lentamente los dedos de la mano.
-Un jueves...
Y cesó de respirar. Fin
Horacio Quiroga (autor)
El hombre pisó algo blancuzco, y en seguida sintió la mordedura en el pie. Saltó adelante, y al volverse con un juramento vio una yaracacusú que, arrollada sobre sí misma, esperaba otro ataque.
El hombre echó una veloz ojeada a su pie, donde dos gotitas de sangre engrosaban dificultosamente, y sacó el machete de la cintura. La víbora vio la amenaza, y hundió más la cabeza en el centro mismo de su espiral; pero el machete cayó de lomo, dislocándole las vértebras.
El hombre se bajó hasta la mordedura, quitó las gotitas de sangre, y durante un instante contempló. Un dolor agudo nacía de los dos puntitos violetas, y comenzaba a invadir todo el pie. Apresuradamente se ligó el tobillo con su pañuelo y siguió por la picada hacia su rancho.
El dolor en el pie aumentaba, con sensación de tirante abultamiento, y de pronto el hombre sintió dos o tres fulgurantes puntadas que, como relámpagos, habían irradiado desde la herida hasta la mitad de la pantorrilla. Movía la pierna con dificultad; una metálica sequedad de garganta, seguida de sed quemante, le arrancó un nuevo juramento.
Llegó por fin al rancho y se echó de brazos sobre la rueda de un trapiche. Los dos puntitos violeta desaparecían ahora en la monstruosa hinchazón del pie entero. La piel parecía adelgazada y a punto de ceder, de tensa. Quiso llamar a su mujer, y la voz se quebró en un ronco arrastre de garganta reseca. La sed lo devoraba.
-¡Dorotea! -alcanzó a lanzar en un estertor-. ¡Dame caña1!
Su mujer corrió con un vaso lleno, que el hombre sorbió en tres tragos. Pero no había sentido gusto alguno.
-¡Te pedí caña, no agua! -rugió de nuevo-. ¡Dame caña!
-¡Pero es caña, Paulino! -protestó la mujer, espantada.
-¡No, me diste agua! ¡Quiero caña, te digo!
La mujer corrió otra vez, volviendo con la damajuana. El hombre tragó uno tras otro dos vasos, pero no sintió nada en la garganta.
-Bueno; esto se pone feo -murmuró entonces, mirando su pie lívido y ya con lustre gangrenoso. Sobre la honda ligadura del pañuelo, la carne desbordaba como una monstruosa morcilla.
Los dolores fulgurantes se sucedían en continuos relampagueos y llegaban ahora a la ingle. La atroz sequedad de garganta que el aliento parecía caldear más, aumentaba a la par. Cuando pretendió incorporarse, un fulminante vómito lo mantuvo medio minuto con la frente apoyada en la rueda de palo.
Pero el hombre no quería morir, y descendiendo hasta la costa subió a su canoa. Sentose en la popa y comenzó a palear hasta el centro del Paraná. Allí la corriente del río, que en las inmediaciones del Iguazú corre seis millas, lo llevaría antes de cinco horas a Tacurú-Pucú.
El hombre, con sombría energía, pudo efectivamente llegar hasta el medio del río; pero allí sus manos dormidas dejaron caer la pala en la canoa, y tras un nuevo vómito -de sangre esta vez- dirigió una mirada al sol que ya trasponía el monte.
La pierna entera, hasta medio muslo, era ya un bloque deforme y durísimo que reventaba la ropa. El hombre cortó la ligadura y abrió el pantalón con su cuchillo: el bajo vientre desbordó hinchado, con grandes manchas lívidas y terriblemente dolorosas. El hombre pensó que no podría jamás llegar él solo a Tacurú-Pucú, y se decidió a pedir ayuda a su compadre Alves, aunque hacía mucho tiempo que estaban disgustados.
La corriente del río se precipitaba ahora hacia la costa brasileña, y el hombre pudo fácilmente atracar. Se arrastró por la picada en cuesta arriba, pero a los veinte metros, exhausto, quedó tendido de pecho.
-¡Alves! -gritó con cuanta fuerza pudo; y prestó oído en vano.
-¡Compadre Alves! ¡No me niegue este favor! -clamó de nuevo, alzando la cabeza del suelo. En el silencio de la selva no se oyó un solo rumor. El hombre tuvo aún valor para llegar hasta su canoa, y la corriente, cogiéndola de nuevo, la llevó velozmente a la deriva.
El Paraná corre allí en el fondo de una inmensa hoya, cuyas paredes, altas de cien metros, encajonan fúnebremente el río. Desde las orillas bordeadas de negros bloques de basalto, asciende el bosque, negro también. Adelante, a los costados, detrás, la eterna muralla lúgubre, en cuyo fondo el río arremolinado se precipita en incesantes borbollones de agua fangosa. El paisaje es agresivo, y reina en él un silencio de muerte. Al atardecer, sin embargo, su belleza sombría y calma cobra una majestad única.
El sol había caído ya cuando el hombre, semitendido en el fondo de la canoa, tuvo un violento escalofrío. Y de pronto, con asombro, enderezó pesadamente la cabeza: se sentía mejor. La pierna le dolía apenas, la sed disminuía, y su pecho, libre ya, se abría en lenta inspiración.
El veneno comenzaba a irse, no había duda. Se hallaba casi bien, y aunque no tenía fuerzas para mover la mano, contaba con la caída del rocío para reponerse del todo. Calculó que antes de tres horas estaría en Tacurú-Pucú.
El bienestar avanzaba, y con él una somnolencia llena de recuerdos. No sentía ya nada ni en la pierna ni en el vientre. ¿Viviría aún su compadre Gaona en Tacurú-Pucú? Acaso viera también a su ex patrón mister Dougald, y al recibidor del obraje.
¿Llegaría pronto? El cielo, al poniente, se abría ahora en pantalla de oro, y el río se había coloreado también. Desde la costa paraguaya, ya entenebrecida, el monte dejaba caer sobre el río su frescura crepuscular, en penetrantes efluvios de azahar y miel silvestre. Una pareja de guacamayos cruzó muy alto y en silencio hacia el Paraguay.
Allá abajo, sobre el río de oro, la canoa derivaba velozmente, girando a ratos sobre sí misma ante el borbollón de un remolino. El hombre que iba en ella se sentía cada vez mejor, y pensaba entretanto en el tiempo justo que había pasado sin ver a su ex patrón Dougald. ¿Tres años? Tal vez no, no tanto. ¿Dos años y nueve meses? Acaso. ¿Ocho meses y medio? Eso sí, seguramente.
De pronto sintió que estaba helado hasta el pecho.
¿Qué sería? Y la respiración...
Al recibidor de maderas de mister Dougald, Lorenzo Cubilla, lo había conocido en Puerto Esperanza un viernes santo... ¿Viernes? Sí, o jueves...
El hombre estiró lentamente los dedos de la mano.
-Un jueves...
Y cesó de respirar. Fin
Buenas noches participantes de SOCIOLOGIA EDUCATIVA, a continuación explico la actividad del blog, correspondiente a la IV unidad
- Partiendo del estudio del rol del docente, explique, a través de un comentario profundo y crítico, cual es el papel que cumple el maestro como agente de cambio en la sociedad y la escuela.
lunes, 30 de noviembre de 2009
Buenas noches ACTIVIDAD PARA CASTELLANO Y LITERATURA III
1.- Lee el párrafo que se presnta a continuación.
2.- Imprimalo
3.- Separe con corchetes [ ] las oraciones principales y con paréntesis ( ) las subordinadas.
4.- La actividad es individual
Los antropólogos, quienes se especializan en estudiar la ¨cultura¨ como noción que atraviesa la historia de los pueblos tanto occidentales como no occidentales, generalmente han acentuado las diferencias entre grupos de gente que hablan idiomas distintos y continúan modos de vida diferentes también. Pero es importante no pasar por alto las similitudes, a las que Donald Brown (1991) llamó “universales humanos”. El término relacionado “universales culturales” se emplea generalmente para referirse a valores y creencias que se encuentran en todas o en la mayor parte de las culturas, tales como la prohibición del incesto y el canibalismo.
5.- Analice las siguientes oraciones
a.- Ayer, en la universidad, los alumnos de educación, llevaron los trabajos de castellano a la profesora.
b.- Llovió copiosamente en la sabana, todo el fin de semana
6.- Además de analizar las oraciones gramaticalmente, debe responder para cada una, los siguientes aspectos:
-Clase de sujeto
-Tipo de sujeto
-Clase de predicado
- Objeto directo
-Objeto indirecto
-Complementos circunstanciales
7.- LLEVE LAS DOS ACTIVIDADES, EN FÍSICO, EL LUNES 7-12-09
domingo, 22 de noviembre de 2009
Buenas noches, jóvenes de SOCIOLOGÍA EDUCATIVA. Observen el video, a través del link que se les presenta y posteriormente, realicen el comentario, analítico, en función de: la escuela y el educador como agente de cambio.
http://www.youtube.com/watch?v=rmjwn0lQnko
http://www.youtube.com/watch?v=rmjwn0lQnko
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